Daniel CallejasNotimex, la que era “la agencia de noticias del estado mexicano” este miércoles cumple 350 días de huelga, casi un año en el olvido de Sanjuana Martínez, su directora general.
Es así que desde el 20 de febrero del año pasado, las instalaciones de Baja California 200 en la Roma Sur tienen banderas rojinegras, mientras que su cuenta de Twitter se quedó en 399 mil tuits para ser un fantasma dentro de los medios públicos.
Con muy pocas respuestas y un sueldo que sigue cobrando Martínez Montemayor —de 87 mil 998.81 pesos netos, según el portal de Nómina Transparente—, Notimex pierde hoy día una fuerza importantísima para el Estado como bastión informativo y, en una de esas, hasta político.
Más ahora, en un contexto que marca elecciones en este año. El prestigio con el que comenzó en agosto de 1968 como medio del Estado, hoy es simplemente una vergüenza nacional ante las otras agencias extranjeras (como EFE, Reuters, AP, y otras).
El periodismo de agencia en México antes de Notimex
Antes de la llegada de López Obrador y Morena al poder, Notimex fue ampliamente criticado por ser un portal que fungía como “vocero” de las decisiones priistas y presidenciales por las que vivió 38 años.
De existir hoy, completaría el robusto ente informativo del Estado, sumándose a las necesidades del Sistema Público de Radiodifusión (SPR) con el Canal 11, Canal 14 y otros canales públicos de televisión y radio. Así, el presidente y Morena tendrían dónde difundir a placer sus contenidos, logros y propuestas, como cuando criticaban al PRI por hacerlo.
De hecho, no sería sorpresa saber que los medios públicos se alinean al poder y terminan por convencer a la gente con lo que el presidente quiere que sepan, y no con lo que deberían informarse, de algún modo rivalizando con los medios privados que tanto ha atacado López Obrador.
Y es que recientemente estas diversas plataformas del Estado han transmitido entrevistas con los secretarios, subsecretarios o cualquier funcionario del gobierno, a manera de enaltecer su servicio público. Sí, como el viejo PRI, de lo que siempre se quejaban los entonces opositores.
Notimex, por la soberbia de Sanjuana Martínez, está perdiendo la oportunidad de publicar todo lo que el presidente quiera, en el sentido político. Y en el sentido informativo —que debería ser prioridad—, todo lo relacionado con el Covid19: Vacunación, cepas, cifras, cuáles vacunas vamos a tener en México, difusión de dónde registrarse… en fin.
El origen de la información internacional
Si bien por ley deberá guardar postura ante las elecciones, en otros tiempos siempre era útil contar con entrevistas con los candidatos o personajes de la política, dándole el tono neutral, aunque en el fondo apoyando la línea editorial dictada desde el piso de arriba.
Hoy, esas indicaciones de los superiores no son escuchadas. El pasado 11 de enero el presidente López Obrador urgió a llegar a un acuerdo definitivo entre Sanjuana Martínez y Notimex.
El Sindicato Único de Trabajadores (SUT) de Notimex acusa que Martínez, junto con sus directivos, “se burlan de la ‘austeridad republicana’ y la constitución al quitar al erario 10 millones de pesos en pleno paro y violar las leyes impunemente”.
De ser así es obvio presentar las evidencias y esperar que Sanjuana Martínez haga algo ya, a menos que tenga algo mejor que hacer (más allá de bloquear a todos en Twitter), justo ahora que la agencia está en huelga.
