Daniel CallejasAyer comenzó el ciclo escolar para 25 millones de estudiantes del nivel básico y Aurelio Nuño Mayer, titular de la SEP, dio la bienvenida. Muy convencido recibió el programa piloto del Nuevo Modelo Educativo, que “mejorará las capacidades cognitivas y de preparación de niños”.
Más de 90 mil maestros entregarán sus conocimientos basados en el proyecto que tanto le costó –intelectualmente– a la SEP. Naturalmente, los resultados se verán al paso de los meses y como cualquier reforma implementada, tendrá sus conflictos. Uno de los primeros problemas fue surtir la lista de útiles y exigencias de instituciones; más de mil pesos por hijo dependiendo del grado.
A veces resultan exageradas ciertas exigencias de las escuelas, por ejemplo, forrar los libros. El hule cristal es carísimo y adornar los cuadernos con este material solo resulta bonito y no funcional, se cae al paso de dos meses. Esto se incluye en las necedades del modelo educativo: la SEP firmó convenios con las distribuidoras de papelerías para generarles ganancias.
No sorprende pedir cuadernos de cierto tipo o juegos de geometría de alto nivel. El objetivo es que se retribuya lo público de la educación a través de estos negocios; representa 40 por ciento de las ganancias del sector. Afortunadamente se han regulado los precios, si no a favor de los ciudadanos, sí para que se venda generando competencia.
Quizá, y mi falta de experiencia como padre lo demuestre, se sigue gastando sin notar un beneficio en el aprendizaje de los estudiantes. Pero como profesionista es perceptible que solo se incluyó el inglés como materia obligada para que en 15 años haya estudiantes bilingües.
No obstante, es recomendable aprender primero a hablar bien español porque de otra forma el inglés será pronunciado como lo hace Peña Nieto.
En fin, la SEP y el priismo continúan con los mitos de mover a México y solo dan vueltas en círculo sin progreso alguno. Es necesario antes instruir a los maestros para que así puedan complementar las necesidades de los estudiantes. Aunque parece que la raíz de todo este problema es el sistema obsoleto de contenidos que en la vida diaria jamás usarán.
La reforma en educación, un nuevo mito educativo vendido como la respuesta de la vida. Y lo peor, nos crean la necesidad de utilizarlo porque no tenemos alternativas como en otros países mejor desarrollados.
