Jhoselin SánchezLa preocupación en torno a Corea del Norte se ha puesto sobre la mesa para los propios ciudadanos estadounidenses; esto, en medio de un turbulento contexto del lanzamiento de mísiles balísticos por parte del país asiático, y un discurso desde el Ejecutivo local que amenaza con el uso de la fuerza militar.
Para la sociedad de Estados Unidos (EEUU), en cuestión de cuatro años, se ha incrementado su preocupación sobre el tema de Corea del Norte. Al punto de que, siete de cada diez ciudadanos considera que su gobierno debería tomar las amenazas de Norcorea “muy en serio”, con el 71% de opiniones a favor. Cuando, en 2013, el sentir hacia esto mismo se concentraba en el 56%.
Esta apreciación fue plasmada en un ejercicio de opinión que realizó el prestigiado Centro de Investigación Pew (Pew Research Center), con ciudadanos de los 50 estados que conforman dicho país. Mil 504 estadounidenses de más de 18 años fueron entrevistados del 25 al 30 de octubre de este año. Y cuyos resultados, fueron publicados por este think tank el pasado 3 de noviembre, en el marco de la visita que está haciendo el mandatario de EEUU, Donald Trump, en el continente asiático.
Otro factor de la encuesta que mostró un significativo crecimiento, con 17 puntos porcentuales, tiene que ver con la pregunta “¿Corea del Norte es capaz de lanzar un misil nuclear que pueda llegar a EEUU?, dicho planteamiento fue considerado de manera relevante por el 64% de los entrevistados.
Visita de Donald Trump a Asia y búsqueda de apoyo contra Pionyang
Con este tema en la agenda, el presidente de la Unión Americana ha llegado a Asia en una gira que contempla la visita a Japón, Corea del Sur y China; incluso, no descarta un encuentro con el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin.
El primer país al que arribó Donald Trump el pasado domingo 5 de noviembre, fue Japón. Durante su estancia declaró que la nación nipona es un “socio preciado y crucial” para su país.
Y sobre el tema de Norcorea comentó que está considerando añadirlo a la lista de países patrocinadores del terrorismo – y que realiza el Departamento de Comercio de la Unión Americana-. Cabe destacar que Pionyang, salió de dicho listado en 2008.
Además, comentó que trataría esta temática con otros países como China, Corea del Sur y Rusia, en los que busca un respaldo al aislamiento del país asiático.
Al respecto, China y Rusia se han pronunciado contra las amenazas nucleares que ha encabezado el líder norcoreano Kim Jong-Un, sin embargo, esto no ha significado o traducido en un rompimiento total de las relaciones comerciales con dicha nación.
Hay que recordar que el pasado 16 de septiembre Pionyang lanzó un mísil de mediano alcance (tipo Hwasong-12) que sobrevoló el cielo japonés para finalmente caer en el océano Pacífico.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha condenado las acciones de Norcorea al respecto, tras el lanzamiento de estos artefactos en más de una ocasión.
Como muestra de estas acciones, la resolución número 2375 del pasado 11 de septiembre de 2017 que alude a una serie de sanciones tras los lanzamientos balísticos del 3 y 28 de julio de este año.
Las acciones que se tomaron en cuenta plantean prohibir a Corea del Norte exportar carbón –por citar uno de sus principales productos de exportación-, y no permitir la compra de este material, una vez que haya atravesado el territorio de Pionyang o hayan sido transportadas por buques de origen norcoreano.
Además de cortar el lazo comercial con empresas provenientes de esta nación asiática, e instar a los demás Estados a no invertir en ella.
Sin embargo, dos Estados están exentas de aplicarlo –dos ellos parte de los cinco Estados que conforman el Consejo de Seguridad, junto a Estados Unidos, Reino Unido y Francia; y quienes pueden obligar a otros a Estados seguir sus resoluciones- , al menos, en el ramo de la infraestructura y el abastecimiento de carbón, y son: China y Rusia.
En dicho documento, se expresa que China puede mantener con Corea del Norte aquellos proyectos enfocados a crear infraestructura; y por parte de Rusia, puede mantener la exportación de carbón al país asiático
“(…) decide que la presente disposición no se aplicará con respecto a los proyectos de China y la RPDC de infraestructura de energía hidroeléctrica existentes y el proyecto portuario y ferroviario Rajin-Khasan de la Federación de Rusia y la RPDC con el único fin de exportar carbón de origen ruso”, se lee en el punto 18 de la dicha Resolución.
Y justamente, Rusia y China, son aquellos países con los que Donald Trump quiere complementar la amenaza total hacia Corea del Norte, tal vez, sin haber considerado previamente estos puntos dispuestos en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Cabe destacar que la relación de China y Rusia con Corea del Norte tiene un antecedente histórico y no tan tenso como el que en el discurso oficial plasma EEUU. El investigador y doctor en Política por la Universidad de Columbia, José Luis León, cataloga la relación entre Rusia-Corea del Norte y China-Corea del Norte, como: pragmática.
China y Rusia, se mantienen como aliados comerciales importantes y fundamentales en las materias antes señaladas. Y en una revisión realizada por el doctor José Luis León al 2003, estas naciones habían sido aquellas que más habían recibido visitas del mandatario en tuno norcoreano y padre del actual dirigente, Kim Jong-il.
Por ello, aunque ambos Estados hagan condenas públicas a las actividades balísticas de Corea del Norte, en la práctica el vínculo comercial continúa.
Ante dicho escenario, pese a la preocupación de la ciudadanía estadounidense frente a los lanzamientos de Corea del Norte, las acciones que emprenda Donald Trump aún están por revisarse, y se mantienen sujetas al apoyo que sumen (o no) de otras Naciones, aunado al tiempo que le resta a la actual administración del presidente de EEUU.
