Frida GuerreraEl 01 de octubre de 2018 hice contacto con María Esperanza, hermana mayor de Fabiola Palomo González, ella estando Campeche y yo en la Ciudad de México.
Era la voz quebrada de una mujer que no sabía qué hacer: el 28 de septiembre de 2018, su tía, vecina de su hermana, le notificó que había gritos en la casa, horas después Fabi fue encontrada asesinada, las autoridades querían determinar un robo.
Sin embargo eso era imposible, Fabi era la mujer más precavida, también dijeron había sido un accidente, la realidad era otra, había sido asesinada en su casa. Desde ese 28 de septiembre Marietta, como le decimos cariñosamente, forma parte de las #VocesDeLaAusencia, no lo pidió, la pusieron en este grupo al que nadie quiere pertenecer.
Es la hermana, junto a sus padres, quien busca justicia por Fabiola, su única hermana.
Los días se vuelven álgidos, son tan fríos como diciembre, calan los huesos, el abrigo cálido nunca llega, son días paradójicos cuando la inmensa mayoría de la sociedad está llena de fiesta: posadas, Navidad, Año Nuevo, comida, risas, de este lado en este grupo que en estos días permanece callado.
Familias enteras asesinadas, las que no se ven, las que la mayoría de la sociedad, igual que las autoridades, olvidan; las recuerdan, las añoran, las necesitan tanto como ese sol que no calienta por más que se vea.
Los pensamientos de estas madres, padres, hijos, hijas, familias las llaman en todo momento para evitar que sean olvidadas sus risas, su amor, su calor, buscan las palabras necesarias para que tú entiendas qué #LesHacenFalta y la fiesta de la vida se acabó para ellas, gracias a la decisión de un asesino.
Carta de Natividad a su hija asesinada
Para estos días de fiesta es mi deseo que mi hija Fabiola estuviera con nosotros, pero por mala suerte me la arrebataron de la vida y tengo la esperanza de Dios que haga justicia.
Te dejó las letras, las palabras de dolor de
una madre esperanzada en la justicia terrenal, depositando su fe en la justicia
divina.
Carta para la Navidad y el niñito Jesús el 23 de
diciembre de 2018 siendo las 18 horas del día domingo escribo esta carta con mi
corazón desecho y sin mucho ánimo por la vida.
Si en este mundo existen los milagros quisiera
que Dios y el niñito Jesús me devuelvan a mi hija Fabiola, sí a nadie más en
este mundo, la amo más de lo que esa
persona que le trató con odio tanto odio que la destruyó, la aniquiló, la mató, le quitó su vida y la
hizo nada.
Quiero que sepas que para mí ella era mi todo, mi mundo, mi bebé y que ella era hija, hermana, madre, amiga, y, que la amábamos, me arrebataron el corazón y la vida junto con ella.
Se me fueron mis ganas de vivir, se fue mi amor me han matado en vida madre de Jesús, a ti imploró, tú que perdiste a tu hijo y que sabes el dolor de perder un hijo, a ti virgen María te pido que al igual que a tu hijo le devuelvan la vida a mi hija Fabiola y si lo que te pido es mucho para ti entonces regálame siquiera justicia que el infame asesino material que quien lo mandó hacer caigan en manos de la justicia que paguen su crimen y que la fiscalía sea justa y que no se encubridora del hecho; es lo que pido para mi
Señora Natividad González, mamá de Fabi
Desde FridaGuerrera agradecemos que lean semana a semana, las historias de vida de mujeres y niñas que han sido asesinadas en este país, solo con el objetivo de que las conozca y entendamos que, en estas historias de vidas arrancadas, el único culpable es el asesino, y que usted, nos ayude a evitar que #NIUNAMÁS, deje de ser hashtag, para ser realidad. Esperamos que el próximo 2019, cada niña, mujer, niño, de este país dejen de ser asesinados.
Eres madre, padre, hermana, hermano, hija, hijo. De una mujer víctima de feminicidio, desaparición, o intento de feminicidio búscame, ayúdame a visualizarlas y contar su historia. Voces de la Ausencia.
@FridaGuerrera
