Hoy es Nochebuena, ante la pandemia la mayoría la pasará solo en casa, es muy triste saber cuántas vidas se han perdido durante este año debido a esta enfermedad, seguramente muchos somos afortunados y no hemos perdido a nadie de nuestra familia pero seguramente añoraremos reunirnos con quienes amamos, y tal vez hoy podamos entender el dolor de la ausencia.
Ana Mireya Marmolejo Bustos, tenía 24 años, madre de dos pequeños que una vez más pasarán estos días sin mamá.
Ana rebosaba alegría, era bromista, juguetona, pero sobre todo cariñosa con toda su familia, deseaba brindar un futuro lleno de estabilidad a sus hijos, las situaciones difíciles que se le presentaban las enfrentaba con valor, tenía sueños por cumplir y una vida que compartir con todos los que la amaban.
El 9 de febrero de 2017, Ana fue vista frente a su casa en compañía de su pareja sentimental, poco después de las once de la noche, su cuerpo fue localizado sin vida muy cerca de su domicilio, en Ixtapaluca, Estado de México. Después del hallazgo de su cuerpo, el presunto responsable desapareció.
Cabe destacar que luego de dos años de indiferencia y corrupción de las autoridades del Estado de México.
El presunto responsable fue ubicado con nuestros propios recursos detenido en colaboración con las autoridades del Estado de Michoacán y puesto a disposición ante la Fiscalía del Estado de México.
Para que solo hicieran una parte de su trabajo. Actualmente se encuentra sujeto a proceso por ser el presunto responsable del feminicidio de Ana.
Siete de cada 10 feminicidios, impunes en Edomex
Amada Ana,
Es difícil escribir y saber que no leerás esto y peor aún, no habrá respuesta, pero quiero platicarte en nombre de toda la familia, que es tiempo de celebraciones, tiempo de regocijo y tiempo de algarabía, a pesar de la pandemia y es donde todos están apurados buscando regalos y planeando que hacer para la cena navideña, organizándose para convivir con la familia.
No te quiero angustiar, ni abrumar, pero vivir sin ti ha sido muy difícil y complicado.
Cada Navidad extrañamos tu presencia, tu alegría, tu afecto y tu entusiasmo por la llegada de estas fechas… ¡te encantaban!
Tu ausencia aun paraliza nuestros pensamientos porque estamos llenos de tus recuerdos, nos encantaría verte a la cara y decirte que fuiste uno de los seres más hermosos que estuvieron en nuestras vidas, que el amor que nos diste fue abundante.
Tu lugar siempre estará vacío en la mesa, sin embargo, hacemos todo lo posible por pasarla bien, por alegrarnos de tantas cosas buenas que tenemos, por continuar viviendo con entusiasmo y felicidad.
No te prometo que sea siempre así, lamentablemente tenemos presente que tu partida fue injusta, que un hombre perverso, detestable, repugnante y despreciable decidió que tu vida se extinguiera, TE ASESINÓ, interrumpió tu vida, tus sueños, tus anhelos y nos dejó amputados como familia, estamos en espera de justicia y la conseguiremos.
Mientras tanto, celebramos la navidad en medio de tus recuerdos, ya que ahí te encontramos, ahí te sentimos, porque nunca te irás, jamás te diremos adiós, tú vives eternamente en nuestra mente y corazón.
Ana, anhelamos que seas feliz donde quiera que te encuentres, lejos de la maldad y de la violencia, nosotros estaremos bien.
Amándote por la eternidad… Tu familia.
Diciembre 2020
Eres madre, padre, hermana, hermano, hija, hijo. De una mujer víctima de feminicidio, desaparición, o intento de feminicidio búscame, ayúdame a visualizarlas y contar su historia. Voces de la Ausencia.
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