Bombardear una ciudad en nombre de la defensa de los ciudadanos locales, argumentando que la razón obedece a un ataque químico perpetrado por su gobierno, sin tener pruebas fehacientes sobre ello, es posible, y esa fue la lección que vimos desde el pasado 13 de abril cuando Estados Unidos (EEUU), Gran Bretaña y Francia ordenaron lanzar misiles a Siria.
El viernes 13 de abril, en medio de incertidumbre que anunciaba el inicio de una Tercera Guerra Mundial, según hacían ver distintos medios de comunicación entre la confusión de un nuevo frente armado por la coalición de estos tres países, se daba a conocer el envío de misiles a Damasco, Siria, cuyo fin, según refirieron los mandatarios de estos tres países, era evitar que el presidente de esta nación, Bashar Al Assad,volviera a hacer uso de ataques químicos contra su población.
Siria ha sido un aliado histórico de Rusia, desde tiempos de la Unión Soviética, por lo que se cuestionaba si la agresión de estos países de Occidente representaba también un frente contra este país euroasiático.
السبت ٧ نيسان/ابريل ٢٠١٨ في دوما، وقع عشرات الرجال والنساء والأطفال ضحايا مجزرة بالسلاح الكيميائي. لقد تم اجتياز الخط الأحمر. بالتالي امرت القوات الفرنسية بالتدخل. pic.twitter.com/Earf4suGmF
— Emmanuel Macron (@EmmanuelMacron) April 14, 2018
Este anuncio de Washington, Paris y Londres se suscitó a raíz de un presunto ataque con gas sarín y cloro en la ciudad de Duma, en Siria, el 7 de abril, que aseguraban, fue efectuado por las tropas sirias, aunque no mostraron pruebas de ello, siendo la única referencia un vídeo que se reprodujo por los medios de comunicación en el mundo. Una investigación formal para determinar responsabilidades toma días o incluso meses.
A perfectly executed strike last night. Thank you to France and the United Kingdom for their wisdom and the power of their fine Military. Could not have had a better result. Mission Accomplished!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 14, 2018
Cabe recordar que, tras sietes años de guerra civil, en Duma persistía el único grupo opositor al gobierno de Bashar Al Assad, Yaish al Islam, por lo que parecía el escenario perfecto para llevar a cabo una ofensiva química, como la que presuntamente se dio ese fin de semana, la cual, distintos medios señalaban la muerte de poco más de 40 personas, y cuyo culpable era fácil sugerir era el propio mandatario.
La Organización para la Prohibición de Armas Químicas de la Organización de Naciones Unidas (OPAQ), se trasladó a esta zona para comenzar la indagatoria, y este 18 de abril dio inicio, aunque el ataque se configuró antes de un resultado concreto.
La información al respecto de este ataque se ha ceñido a lo dicho por los Cascos Blancos, una organización de voluntarios, con sede en Gran Bretaña, que ha aceptado que parte de su financiamiento ha sido contribuido por Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, y quienes proporcionaron un vídeo del rescate de personas tras ese presunto ataque.
Another Video showing cases of suffocation among civilians, mostly children and women, following the chemical attack against the civilians in #Douma city. #AssadHitsDoumaWithChemicals pic.twitter.com/ItEpVLq5zM
— The White Helmets (@SyriaCivilDef) April 8, 2018
La agencia internacional AFP retomó el vídeo e imágenes de este mismo grupo, ya que han dicho, no cuentan con corresponsales en esta localidad. También, la Organización Mundial de la Salud se basó en dicha información para dictaminar que 43 personas habían muerto.
Vídeo de presunta agresión en Duma, Agencia EFE
Al respecto, el representante oficial del Ministerio de Defensa de Rusia, Igor Komashenkov, declaró que lo ocurrido en Duma fue “una provocación planificada” y en la cual Gran Bretaña había participado”. A lo que añadió, que tenían el testimonio de dos participantes del vídeo quienes, al ser interrogados, explicaron cómo se realizó la filmación y en qué episodios habían participado.
“Los supuestos testigos mostraron sobre las imágenes del vídeo su propia participación en el mismo”, destacó el diario El País, sobre lo dicho por Komashenkov, quien agregó que el video sería difundido.
Consulta el Vídeo de los dos testimonios, fuente agencia de noticias Sputnik:
El presidente francés en una entrevista local afirmó el 12 de abril tener pruebas de que el gobierno de Assad estaba detrás de este ataque, sin embrago, no las mostró. «Tenemos pruebas de que se utilizaron armas químicas y que fue el régimen quien las utilizó», señaló. Además, de referir una intención de apoyar a las organizaciones no gubernamentales (ONG) que ayudan a la población siria en el terreno.
Una ofensiva que no va contra el presidente de Siria, ni de Rusia
El diario estadounidense The Washington Post dio a conocer que funcionarios estadounidenses han afirmado como una acción “poco posible” que Donald Trump apruebe sanciones contra Rusia, ya que no ha habido provocaciones bélicas desde el Kremlin.
La intercepción de los misiles se dio únicamente desde el sistema de defensa sirio.
La única declaración por parte del presidente de Rusia, Vladimir Putin, un día después del lanzamiento de misiles, se centró en referir, como “ilegal que daña seriamente las perspectivas de una solución política en Siria”, además de considerar que fue “un acto de agresión contra un Estado soberano”.
Y advirtió que nuevos ataques por parte de estos países occidentales “provocarían un caos en las relaciones internacionales”.
Una cuestión en la que han coincidido, la Primera Ministra de Gran Bretaña, Theresa May, Emmanuel Macron, presidente de Francia, y Donald Trump, presidente de EEUU, es que no buscan la salida de al Assad, o un cambio de régimen.
Macron consideró que “fue un éxito desde el plano militar”, aunque no “supone se le haya declarado la guerra a Siria”. Se hizo para “devolver la credibilidad a la comunidad internacional”. May comentó “no se trata de un cambio de régimen”.
En tanto, el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, puntualizó que su país “está preparado para actuar de nuevo de forma sostenida para asegurar que Siria entienda que hay un precio que pagar si vuelve a usar armas químicas.
El día siguiente del bombardeo al Assad acudió de forma cotidiana a su ofician, e hizo público un vídeo donde luce firme en sus actividades al frente del gobierno.
صباح الصمود..
رئاسة الجمهورية العربية السورية pic.twitter.com/hhIZT6cOTe
— Syrian Presidency (@Presidency_Sy) April 14, 2018
Vídeo de Bashar al Assad entrando a su oficina de trabajo, un día después de los bombardeos. Fuente: Presidencia de Siria
Incluso, pese al temor de más bombardeos, la ronda de misiles lanzados el 13 de abril ha sido la única. Los gobiernos de esta coalición han dicho que la ofensiva se hizo para advertir al país de Medio Oriente.
En total se lanzaron 103 misiles, de los cuales 71 fueron interceptados por el sistema de defensa aérea de Siria, según informó al Assad, destacando que el gobierno de Rusia no tuvo acción en esta maniobra. Los objetivos alcanzados fueron el Centro de Estudios de Barzé y de Jamraya, en Damasco, la capital de Siria, y otro más en la provincia de Homs.
صباح الصمود..
رئاسة الجمهورية العربية السورية pic.twitter.com/hhIZT6cOTe
— Syrian Presidency (@Presidency_Sy) April 14, 2018
Por ahora se sigue a la espera de los resultados que provea la OPAQ, los ataques han cesado, sin embargo, queda una clara lección de que se puede configurar este tipo de acciones sin tener pruebas claras, y más cuando se hacen acusaciones contra un gobierno, incluso sin tener que requerir una resolución de la Organización de Naciones Unidas al respecto, cuyo papel se limitó a ser un observador más de esta tensa dinámica.