Ana Laura

Carta de Dhayis a Ana Laura, su mamá asesinada hace 24 años

13 diciembre, 2023

Estos días para muchos son sinónimo de alegría, de reflexión, de fiestas. Para otras familias dejaron de serlo.

Algunas ya pasaron por estas fechas y siempre son momentos llenos de emociones encontradas: las luces navideñas son como pequeños fuegos internos que calcinan los pedazos que aún quedan en el corazón, la alegría del resto que no sabe por lo que pasan o hasta de la misma familia, son bofetadas directas a sus rostros ya cansados de llorar, esas palabras de “échale ganas ya pasará”, son lapidarias porque no, no va a pasar, ellas hoy les hacen falta. 

Son familias que han vivido desde entonces infiernos que los van desgastando, esos mismos infiernos hoy las han unido, sabiéndose no solas. Y día a día abrazándose y entendiendo que el dolor permanecerá ahí.

Sus mundos están acabados, nada les va a regresar a sus mujeres, compartir estas cartas dirigidas a ellas, a las asesinadas, no es para generar tu lástima, es para evitar que vuelva a pasar, para ayudarte a cuidar a tu hija, tu hermana, tu madre, a ti.

Hoy iniciamos con las cartas de la ausencia frente a estas fiestas decembrinas, por lo que empezaremos a compartir las cartas de las familias de Voces de la Ausencia, que como cada día, minuto, año, adolecen por la ausencia de sus madres, hijas, hermanas. 

Aquí las líneas escritas por Dhayis, hija de Ana Laura.

Ana Laura González Cayetano nació el 13 de abril de 1977. La primera hija de Lupita y Fernando. 

Lupita le puso ese nombre porque se escucha muy bonito, “le quise poner Berenice, pero me gusto más Ana Laura para ella”. 

Una pequeña que alumbraba el camino de sus padres, que fue educada para amar y respetar a los demás, amable con todos, por ello decidió estudiar enfermería. Una excelente y brillante alumna. Se graduó a los 18 años y pronto entró a trabajar al Hospital General de México del IMSS. 

Dos años después conoció a Antonio, con quien se casó y tuvieron una bebe, el sujeto prácticamente de inmediato empezó a celarla, a violentarla por lo que Ana Laura decidió dejarlo a Antonio, y se quedó a vivir en casa de sus padres en Netzahualcóyotl, Estado de México.

Trabajaba en el hospital y todos los días, era amorosa, cuidaba de su pequeña y convivía con su familia. Sin embargo, el sujeto no dejaba de molestarla, estaba enojado con ella porque interpuso una demanda de pensión alimenticia para la beba. En varios momentos la seguía, la vigilaba, la acosaba. 

El 4 de diciembre de 2000, Ana se levantó, se arregló para irse a trabajar. Todos los días su papá Fernando la acompañaba a la parada, ese día no pudo hacerlo, se despidió de su mamá, dio un beso a la beba y salió. 

Desde la esquina de su casa, Antonio la acechaba. Testigos le comentaron a Lupita, que el sujeto inició una discusión con ella y, sin más, le disparó en dos ocasiones. 

Antonio se mantuvo prófugo de la justicia durante 22 años. Fue hasta mayo de 2022 que fue ubicado y detenido.

Una de las secuelas dolorosas que dejó este crimen, como todos, es el dolor de la entonces beba de un año, Ana, ahora ya convertida en una jovencita, a quien el sufrimiento de saber quién le arrancó a su mamá la hace sentirse traicionada. 

Antonio ya se encuentra en juicio y pronto será sentenciado.

Hola mamá:

Me pidieron hacerte esa carta y sinceramente no sé cómo iniciar esto, pero quiero decirte que no hay día que no te piense, que no imagine y no deseé que estuvieras aquí. 

No voy a negar, estoy en buenas manos y lo sabes, mamá Lupis siempre ha estado para mí, me cuida y me quiere mucho, ya sabes con todo y regaños. Don Fer ni hablar, siempre está y le agradezco todo. Al igual que a Beto, que ahora nos hemos acercado un poco más y eso me da gusto y de tu bebé, hombre, ni hablar, mi cómplice desde que tengo memoria. Tú sabes lo feliz que me hace tener personas tan maravillosas en mi vida. 

Pero me faltas tú.

A lo largo de los años siempre he sentido un vacío en mi corazón, ¿te soy sincera? Hasta ahora me he atrevido a decirlo, tenía miedo a comentarios de “pero no la conociste” “pero yo también la perdí” y que minimizaran mi sentir, aún me cuesta expresarlo y mucho, pero he estado trabajando en ello y me siento bien el haber dado ese paso. 

Últimamente me dueles mucho, ese vacío en el pecho se hizo más y más grande y siempre me pregunto 

¿Cómo superar a algo que no recuerdo? Y es día que no se qué responderme. 

Quiero creer que el hecho de crecer me hace entender más cosas y analizar más la situaciones y por eso el vacío se hace más grande, aprendes a notar la ausencia de alguien, de ese alguien que debía estar contigo y no solo en recuerdos o tal vez no viví ese duelo como todos y eso pienso. 

Estoy a un año de terminar la carrera, ya sabes enfermera, como tú y me siento muy orgullosa porque de esa manera doy honor a tu recuerdo y a mis papás, que espero no lo tomen a mal, les agradezco todo lo que hacen por mi y su cariño, saben que los quiero mucho y saben que mis logros van todos para ti y para ellos. 

Es difícil seguir escribiendo, quiero poner muchas cosas pero las ideas en mi cabeza están disparadas y no puedo aclararlas, las pongo como van surgiendo.

Solo quiero que sepas que te amo y te voy a amar hasta morir, te extraño mucho y no sabes cuánto desearía no tener que escribirte esta carta y poder decirte todo en persona.

Sé que nos hubiéramos llevado muy bien, peleando porque dicen que tenemos el mismo carácter, jeje.

No sabes cuánto daría por un abrazo tuyo ahora… pero te prometo que estoy siendo paciente, sé que nos volveremos a reencontrar, en otra vida quizás, y te lo juro que cuando lo haga no voy a permitir que me separen de ti de nuevo porque otra vida más con tu ausencia no estoy dispuesta a pasar. 

Te amo con mi vida entera y quiero que sepas que siempre voy a gritar por ti y por quienes nos faltan y no vamos a parar hasta que se haga justicia”.

 

Ellas no son números y no se lo buscaron. Cada una de las mujeres que han sido arrebatadas, porque en México se puede asesinar mujeres y no pasa nada. 

                                                                                                          Diciembre 2023

Eres madre, padre, hermana, hermano, hija, hijo. De una mujer víctima de feminicidio, desaparición, o intento de feminicidio búscame, ayúdame a visualizarlas y contar su historia.

P.D. Cada uno de los textos expuestos en este espacio, son con autorización y acompañamiento de las víctimas. Porque solo somos la extensión de su grito de justicia.

@FridaGuerrera

@vocesDLAusencia

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