Jhoselin SánchezAl histórico conflicto palestino-israelí le se añade otro episodio, uno de tipo cultural en el que la ciudad de Hebrón ha sido consagrada como Patrimonio de la Humanidad palestino, decisión que enfureció a Israel debido al valor de esta zona para cada pueblo.
El pasado viernes la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró a la ciudad de Hebrón, ubicada en Cisjordania -territorio administrado por la Autoridad Nacional Palestina- como Patrimonio Histórico. A su vez lo colocó en la lista de Patrimonios Culturales en peligro.
El Comité del patrimonio cultural conformado por 21 países (Túnez, Angola, Turquía, Azerbaiyán, Burkina Faso, Croacia, Cuba, Finlandia, Indonesia, Jamaica, Kazajistán, Kuwait, Líbano, Perú, Filipinas, Polonia, Portugal, Corea del Sur, Tanzania, Zimbabwe y Vietnam), resolvió con 12 votos a favor de la resolución, seis en contra y tres abstenciones.
Hebrón es reclamada por ambos Estados, debido a las raíces históricas y religiosas que representa para cada uno, ya que en esta zona se cree están enterrados los restos de Abraham, líder tanto del islam como del judaísmo. Para los palestinos este recinto es conocido como la Mezquita de Ibrahim y para los israelís es conocida como la Tumba de los Patriarcas.
Ante la declaratoria de la UNESCO, Israel respondió con el anuncio de un recorte por un millón de dólares a las aportaciones que proporciona a este órgano cultural de la ONU. Y esta suma de dinero la destinarán a la construcción del Museo del Patrimonio Judío en Hebrón.
El presidente de esta nación, Benjamin Netanyahu, consideró como “delirante” dicha decisión y una mentira. Además, refirió que para ellos este hecho representa una declaración de zona “no judía”. Inmediatamente Estados Unidos, un aliado histórico de Israel, lo respaldó diciendo que hay un sesgo anti-israelí.
En tanto, la Ministerio de Asuntos Exteriores de Palestina interpretó esta proclamación como un reconocimiento a la soberanía palestina.
En 1997 la zona de Hebrón, a través de un protocolo con el mismo nombre, fue dividida entre palestinos e israelíes. Una quinta parte corresponde a los israelíes, el área en la que se encuentra resguardada por un control militar.
Contexto social de Hebrón
La resolución de la UNESCO destaca el valor histórico de esta ciudad, ya que se encuentra en la lista de las más antiguas del mundo, cuyo origen data del periodo 3 mil años antes de Cristo.(A.C).
Actualmente, esta demarcación está poblada por 200 mil palestinos y aproximadamente 850 judíos, pese a la diferencia en número, se ha acusado a los israelíes de establecer un Apartheid en la zona, debido a que las áreas que controlan impiden el paso peatonal a los palestinos o obligan a los palestinos a pasar por puntos de control para poder acceder a la mezquita.
De acuerdo al reportaje “Hebrón, la ciudad fantasma”, publicado en diciembre de 2016 por el diario español El Mundo, da cuenta de que 600 soldados israelíes resguardan las seguridad de los 850 colonos, y para ello han buscado desplazar los propios palestinos a través de restringir el paso en distintas calles del área con el establecimiento de puntos de acceso cercados con puertas de seguridad y el cierre de unas mil 800 tiendas palestinas.
Los habitantes de origen palestino han recurrido a poner rejas en sus hogares debido a los ataques con piedras por parte de los colonos judíos.
Esta zona se ha convertido en un punto de tensión entre ambos pueblos que lo habitan.
El haber declarado esta ciudad como patrimonio cultural implica informar a la comunidad internacional sobre condiciones (conflictos armados) que amenazan las características del lugar, y que justifican su adhesión a dicha lista, y la aplicación de medidas correctivas.
Esta victoria diplomática, tal como ha sido calificada por especialistas, representa un paso más para Palestina, nación que ha sido respaldada por otros países en su proceso a convertirse en un Estado; aunque el proceso continúa.
Cabe señalar que la ONU ha reconocido a Palestina como Estado observador no miembro, lo que reconoce el fin a la ocupación del territorio y el derecho a tener un Estado independiente, aunque la decisión para ser aceptado como Estado en pleno derecho, le corresponde al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas -conformado por los cinco miembros permanentes: Estados Unidos, Gran Bretaña, China, Rusia y Francia; y nueve países rotatorios- resolver a través de una votación unánime y que ninguno opté por vetar tal propuesta. En dicha votación Estados Unidos suele ejercer el derecho de veto.
