Daniel Callejas¿Ya decidiste el futuro del NAIM? Estos días de incertidumbre aérea al parecer ya terminarán, así como el agobio de cuestionarnos si es mejor Santa Lucía o el Lago de Texcoco para construir el nuevo aeropuerto.
Durante semanas hemos escuchado, leído y visto opiniones en contra y a favor de la que debe ser la obra de infraestructura más importante de México en los últimos años. Sin embargo, tanto Andrés Manuel López Obrador como el próximo titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, se han encargado de confundir al “pueblo sabio” con estudios y análisis que en su mayoría delatan interés por llevar a cabo el proyecto en Santa Lucía.
A menos de 24 horas de que iniciara la consulta ciudadana, Jiménez Espriú presentó a los medios de comunicación un estudio en inglés -que no estaba traducido “por cuestiones de tiempo”- en el que se demuestra la compatibilidad de operación entre el actual aeropuerto y la Base Militar de Santa Lucía. Eso sí, aclaró que la opción de Texcoco es viable todavía, pero no ahondó en más detalles de esta alternativa.
Ya sabemos que Andrés Manuel ama a Lucía, pero hay que recordarle a la próxima administración que también es su deber generar certidumbre y confianza para la Iniciativa Privada. Los empresarios no pueden vivir sin inversiones, por supuesto, así que se han hecho notar.
Por ejemplo, Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex dijo que López Obrador es quien debe tomar la decisión sobre el NAIM y hacerse responsable de las consecuencias que su criterio traiga consigo.
Además, es necesario saber que si se cancela el avance entre 20 y 30 por ciento que ya se tiene en el lago de Texcoco, se debe indemnizar tanto al Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), como a los demás empresarios que han puesto dinero en la construcción.
Obviamente esto nos lleva a la difícil afirmación que AMLO no quiere aceptar: que siempre sí va a salir más caro echar para atrás lo realizado hasta ahora. E imagínense si también se invierte en la construcción de las dos pistas para Santa Lucía… ¡Como si el dinero sobrara en esta austeridad!
En fin, cual sea el resultado de la consulta, la actual Base Aérea de todos modos tendría que cambiar de sede para que sus operaciones no colisionen con el nuevo proyecto aeroportuario, dio a entender Jiménez Espriú, quien además señaló que al parecer se han adquirido terrenos en Querétaro para la reubicación de operaciones militares.
En conclusión, si Santa Lucía gana la Consulta Ciudadana, pierden los inversionistas. Pero si gana el lago de Texcoco… ¿perderá los seguidores de Andrés Manuel?
Confiemos en el “pueblo sabio” y la decisión del próximo presidente.
Apuntes de un Centinela: ¿Y si cancelamos la consulta del NAIM?
