La Cuarta Transformación está por conquistar a México y el 1 de diciembre formalmente inicia este nuevo camino, según el propio Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de México.
Se anunció la exclusiva lista de invitados que asistirán a la toma de protesta. Entre ellos, Ivanka Trump, asesora del presidente estadunidense, también vendrán Mike Pence, vicepresidente de aquella nación. Y a pesar del repudio de muchos, Nicolás Maduro estará presente en la ceremonia.
Para este sábado, se verá lo que puede ser el #AMLOFest, que le viene incluyendo cantantes, escritores, periodistas de izquierda, pueblos indígenas y todos los amigos del nuevo presidente.
Además, la entrega de la banda presidencial la hará su viejo amigo, Porfirio Muñoz Ledo, lo que nos priva de ver cómo Enrique Peña Nieto entregará al pueblo directo a las manos de López Obrador.
Todo está dado para que la Cuarta Transformación se pinte de guinda y colores crema, pero no está de más recordar que no será la primera vez que López Obrador asuma este tipo de poder.
¿Por qué? Casi nadie se acuerda cuando en 2006, después de perder las elecciones contra Felipe Calderón, AMLO armó un plantón en Paseo de la Reforma por 47 días.
Posterior a eso, Andrés Manuel hizo su propio acto de toma de protesta el 20 de noviembre en el Zócalo frente a miles de seguidores del tabasqueño. Vaya, hasta “gabinete alterno” hubo y canto al himno nacional.
De hecho, en aquellos días, las televisoras y la prensa hicieron la puntada de llamarle “presidente legítimo” a Calderón para tratar de bajarle protagonismo a López Obrador.
Pero ahora todas las miradas esperan al 1 de diciembre para saber qué mensaje dará en Palacio Nacional en punto de las 17 horas. Curiosamente, volverá a asumir el cargo frente a su gente; 12 años y 10 días después se hizo realidad su sueño.
En una de esas, nos la hace de verdad al reelegirse en 2024, que no permite la Carta Magna actual. Pero bueno, mientras, a esperar la consulta que lo posicione para esa coartada.
Se les fue de las manos
Quienes se quedaron con las ganas son los de Morena, ya que, una iniciativa que a ellos se les ocurrió, se les fue de las manos. Y es que ya cantaban victoria para quitar el fuero y… que les desechan tres artículos del dictamen.
Querían quitarle el “superpoder” de defenderse a senadores, diputados, gobernadores… muchos funcionarios públicos y hasta al presidente, pero se les cayó la dignidad con la pérdida de 21 votos, lo que no dio la mayoría con dos terceras partes de la votación necesarias. Por lo tanto, la iniciativa regresará a comisiones y al Pleno para ser votada.
Ni modo Morena, ya será para la otra. ¿Se imaginan la coincidencia de su aprobación y el inicio de la Cuarta Transformación? Lo que pudo haber significado…