«Cuidado con las alianzas complicadas», decía hace dos siglos el presidente estadunidense Thomas Jefferson –aunque adjudicada a Washington– y referida en los últimos días para las decisiones amistosas que Andrés Manuel ha tenido con la IP.
López Obrador se reunió con ingenieros y, románticamente, reconoció al empresario Carlos Slim como un ejemplo en México por su éxito. Sí, continúan los tiempos de reconciliación y faltaba saber su pensar acerca del dueño de Telmex.
Irónicamente, ambos personajes tuvieron diferencias respecto a la construcción del Nuevo Aeropuerto, del que platicaron en su cita con demás ingenieros. Andrés se opuso y Carlos aseguraba beneficios económicos para el país si se realizaba.
En su reunión acordaron, a través de bromas, una asesoría gratis para definir el futuro de la obra sobre el Lago de Texcoco. Así que el 15 de agosto se dará el dictamen al presidente electo para saber qué sucederá.
De hecho, dentro de sus ideas expuestas resaltan la consulta pública para saber si “el pueblo de México” está de acuerdo con su construcción. No obstante, su discurso dijo más de lo que expresó.
Hablar que de llevarse a cabo la construcción del Nuevo Aeropuerto implica el cierre del actual y la base aérea de Santa Lucía, obliga a sus simpatizantes a creer que debe pararse todo el proyecto porque “sería lamentable” quedarnos sin aeropuerto. ¡Error!
De hacerse la nueva terminal aérea, el actual cerrará sus puertas sí o sí, pero podría considerarse la rehabilitación del terreno para compromisos verdes. Pero de eso nadie plantea nada, todo es construcción desmedida en la ciudad desde ahora hasta antes del 5 de diciembre.
En sí, la idea de concesionar la obra para ocupar ingresos de la IP parecería buena decisión para acercar a más empresarios a la infraestructura mexicana. Además, no cargaría tanto peso el presupuesto público de la nación, pese a la “austeridad” que pretende llevar López Obrador.
Finalmente, Andrés Manuel sabe que ya no es tiempo para cancelar obras (inviable económicamente), de ahí que decidiera “hacer alianzas extrañas con gente indeseable”, como los calificó en campaña. Pero hoy celebramos con abrazos y reconciliaciones por el futuro de México.
Voy a pagar la luz…
No es la canción de Luis Miguel, pero la Comisión Reguladora de Energía (CRE) autorizó la entrada de tres privados, mismos que competirán con la filial de Comisión Federal de Electricidad (CFE) Suministro Básico para entregar energía eléctrica a hogares y comercios.
BH Energy Supply; Enlace y Representación Gubernamental T&M, y Suministro Básico del Centro SUBACE, serán los nuevos competidores. Destaca este último creado por el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y la Cooperativa LF del Centro. Vaya tarea para Manuel Bartlett supervisar hasta dónde puede avanzar la CFE el próximo sexenio.
El androide reaparece
Ricardo Anaya reapareció tras su fracaso monumental en las elecciones para reunirse con el presidente del PAN, Damián Zepeda. Aunque el ex candidato ya no suena para dirigir al partido, algo teníamos que saber de él. Por cierto, Marko Cortés, coordinador de la bancada en la Cámara de Diputados, tiene más chance de quedarse al mando que Ricky Riquín Canallín.
Me dio mucho gusto saludar a Damián Zepeda, Presidente Nacional del PAN.
Posted by Ricardo Anaya Cortés on Monday, August 6, 2018