Los deslices internacionales de Donald Trump

Ha pasado poco más de un año desde que Donald Trump asumió la presidencia de los Estados Unidos y la incertidumbre sobre qué puede hacer con su poder ha comenzado a aclararse día a día, sorprendiendo a la comunidad internacional.

Si bien los temas han sido varios, su postura ante la política exterior es la que más ha llamado la atención, ya que básicamente ha enfrentado y respondido una serie de enormes desafíos que abarcan a prácticamente todo el mundo.

Corea del Norte y sus diferencias nucleares

La relación entre Estados Unidos y Corea del Norte ha estado en la mira de la comunidad internacional por mucho tiempo, no obstante, desde el inicio del mandato de Trump, la “diplomacia” se ha caracterizado por los constantes enfrentamientos entre ambos Jefes de Estado, principalmente con relación al armamento nuclear, así como las pruebas que se han hecho con este por parte del país norcoreano.

Una de las situaciones más tensas que Trump y Kim Jong-un, líder norcoreano, han protagonizado fue a principios de año cuando el asiático aseguró que Estados Unidos está al alcance de sus armas nucleares y que sólo bastaba el botón de su escritorio para demostrarlo.

El magnate utilizó Twitter para responderle a Kim Jong-un escribiendo: «Alguien de su régimen hambriento y empobrecido por favor infórmele que yo también tengo un botón nuclear, pero es mucho más grande y más poderoso que el suyo, ¡y mi botón funciona!».

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Lo sorprendente de todo esto es que, como lo confirmó la Casa Blanca el viernes pasado, estos dos líderes finalmente se van a reunir. Un encuentro que sin duda traerá cambios importantes en la relación bilateral, y desde luego, en la comunidad internacional.

Estado Islámico y el Terrorismo 

Desde campaña, Trump sostuvo que una de sus prioridades sería derrotar al llamado Estado Islámico (EI) y eliminar la amenaza directa que representaba (y sigue representando) para los estadounidenses dentro y fuera de su país.

Y, efectivamente, el presiente norteamericano ha buscado a toda costa derrotar a este grupo terrorista, incluso muchos han afirmado que ha tenido un éxito notable en ello.

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Se dice que este “éxito” ha sido gracias a que cambió las “reglas del enfrentamiento”, ya que ha supervisado una transferencia constante de poder de la Casa Blanca al Pentágono desde que se convirtió en presidente, y esto ha permitido a los comandantes más margen para emprender operaciones bajo su propia autoridad, incluso los oficiales militares han dicho públicamente que la medida ha ayudado a acelerar el progreso en la lucha contra el EI.

«Hemos hecho más contra ISIS en nueve meses que lo que hizo la administración anterior durante toda su administración”, así afirmó el presidente norteamericano en declaraciones previas a la Cumbre Value Voters el pasado 13 de octubre de 2017.

Rusia y la injerencia en las elecciones

El presidente Trump dijo alguna vez que una relación más cercana con el presidente ruso, Vladimir Putin, sería un activo para Estados Unidos, sin embargo, esto ha resultado un tanto difícil por dos principales razones: las constantes amenazas a la seguridad cibernética y el respaldo al dictador sirio Bashar al-Assad, así como la brutal campaña de bombardeo aéreo que ha resultado como consecuencia de ello.

Esto sin mencionar el rusiagate: la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales del 2016 que derivó la victoria de Trump, a través de propaganda contra su rival política Hilary Clinton y amplios vínculos entre gente cercana del magnate con el gobierno de Putin.

México, el enemigo favorito de Trump

Para nadie es un secreto que, desde su campaña, Donald Trump ha realizado fuertes críticas hacia nuestro país, entre ellas podemos destacar las siguientes que, el periódico británico “The Telegraph”, se encargó de recopilar:

  • Cuando México envía a su gente, no están enviando lo mejor de sí mismos, están enviando personas que tienen muchos problemas, y nos están trayendo esos problemas. Están trayendo drogas. Están trayendo crimen. Son violadores. Y algunos, supongo, son buenas personas.
  • México está estafando a los Estados Unidos más que a cualquier otra nación.
  • México continúa generando miles de millones no solo por nuestros malos tratos comerciales, sino también gracias a los miles de millones de dólares en remesas enviados por inmigrantes ilegales en los Estados Unidos.
  • Construiré un gran muro en nuestra frontera sur, y haré que México pague por él.
  • Bajo mi administración, cualquiera que cruce ilegalmente la frontera será detenido hasta que sean expulsados de nuestro país y regresen al país de donde vinieron.

Desde hace muchísimo tiempo, esta relación bilateral ha representado un papel sumamente importante en la política exterior mexicana, por ello, las críticas y acciones del presidente Trump han llevado al país a una situación bastante complicada que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA) y el muro fronterizo se han encargado de encabezar.

La última “escenita” que el presidente de Estados Unidos dejó respecto a nuestro país fue hace unos días, cuando dijo que Enrique Peña Nieto le pidió en una llamada telefónica que hablara públicamente sobre la postura de México de no pagar el muro.

Al respecto, Trump le dijo al presidente mexicano “¿Estás loco?, no voy a hacer eso”.

Luis Videgaray, titular de la Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE), confirmó la versión de Trump y detalló que dicha llamada se realizó el pasado 20 de febrero.

Como resultado de este intercambio de palabras, se canceló la reunión bilateral entre los líderes de ambos países.

¿Qué podemos esperar?

Si algo hemos aprendido durante este año, es que sin importar la situación de que se este hablando, el presidente Donald Trump siempre puede terminar sorprendiendo a muchos, tanto para bien, como para mal.

Bien dicen que el escenario internacional es cambiante, y por ello no podemos dar nada por hecho, mucho menos para alguien tan impredecible como Trump. No obstante, sí podemos afirmar que habrá un antes y un después bastante claro de la época Trump.

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